8 de enero de 2011

Voces al pasar

No.

Una voz repite a los gritos ese monosílabo incesantemente.

Sí.

Las voces de tu cabeza susurran todas las noches esa palabra.
Corta y plagada de esperanza.
Corta e ilusoria.



Espera sentada todas las mañanas en los más profundo de sus sueños algo que se llama:
respuesta.



"No, ya sé que no llegará" Le dice a un amigo.
"Sí, en algún momento llegará. Paciencia."  Dice su mente.



Esa respuesta es breve, tardía, pero es respuesta al fin.
Con su esencia, un poco fría. No importa... Es maravillosa.
Tenés miedo de saber lo que pasará, porque tu cabeza te escupe muchas probabilidades. A todas las temés, pero tampoco te importa. Tenés lo que querías. Todo está bien.
Pensás que escribir, buscás las palabras adecuadas, tratando de que la sinceridad no vuelva a jugarte una mala pasada. Pero ya no te importa. El primer paso está hecho. Todo lo demás vendrá solo.


Por primera vez sos optimista, todo ese vacío desaparece radicalmente. Estás satisfecha.
Lo lograste. Todo aquello que soñaste, todo el futuro que armaste día a día se concretó con una breve respuesta.
Las voces de tu cabeza se callan. Esa voz cambia de parecer y te sonríe. Todos lo hacen.



No.


Esa respuesta nunca llegó. Nunca llega. Y es posible que jamás llegue.
Tu mente alimenta esas expectativas, esas palabras... ¿Para qué?
Simplemente para no recordar. Para soñar. Para creer en algo que cada día parece imposible.
La paciencia se torna ansiedad. Ansiedad que te consume lentamente.
Pero no te importa. Eso te mantiene activa, a pesar de todo.
No importa que la otra parte piense lo contrario..



"Mira alrededor y decide: Tú puedes elegir entre estar triste o contento" Dice una voz ajena a todo.

Elegís simplemente algo de las dos.
No existe otro escape.. Por ahora.

5 de enero de 2011

Nadie en el medio

Hoy me levanté con una extraña sensación: la de sentirme perdedora. Siempre fui pesimista e impulsiva. A veces, ambas se complementan para hacer de mi vida un espanto cotidiano.

No es una cuestión de victimización, sino más una cuestión de desahogo, un intento desesperado de querer enmendar lo imposible, lo ajeno, lo impropio.
Digo y hago boludeces todo el tiempo. Pero quién no? Aprendí una lección en tiempos conflictivos: "La imperfección es parte de nuestra Naturaleza"; pero quizás abuso y abusé de ella en muchas ocasiones.
No es para usar palabras elegantes, pero jamás me comprendieron al tratar de exteriorizar mis más profundos sentimientos. No importa de que tipo.
Soy una mierda en todos sus planos, aunque la gente diga lo contrario. Hago daño, hago sufrir y no entiendo porque las otras partes sufren.. No puedo entenderlos como ellos a mí.



No puedo y no quiero. El cambio es un proceso que empezó hoy. Que empezó con un mail, con un mail donde me hirieron en lo más profundo de mi ser. Una daga necesaria que no la deseaba.. Allí se confirmaban mis sospechas: la de perder absolutamente toda esperanza de corregir ese error.


Errores. Alguna vez voy a escribir una historia sobre ello. Pero hoy estoy motivada a escribir por medio del dolor, de sentir ese dolor que causé a consciencia, sin pensar en la profundidad de las consecuencias. Me transmitieron ese dolor, aquel que taponé por un tiempo y hace poco explotó. Explotó con un olor que sigue perturbándome. Lo enfrenté, me senté ante él y decidí acogerlo, como forma de implorar el perdón que jamás obtendré.
Tampoco quiero que se vaya, quiero convivir con él hasta que me desgarre, por más masoquista que suene. Es el precio que debo pagar. Ni el dinero podrá. Ni la mismísima vida.



No puedo y no quiero. Nada nuevo. Tampoco quiero vivir el pasado. Viviré el presente imaginando historias falsas, alimentándome con ese dolor, transformándolo en una danza alegre en mi cabeza. Así será. Por la mierda que soy. Me lo merezco, no me lo digas.
Ellos estarán bien. Sobreviven. Sobrevivieron. Estarán contentos y esa será la única satisfacción que podré tener. La que hará que yo sobreviva. Vitamina de los dioses. Dulce agonía.



El espanto cotidiano del que mencioné al principio, es sólo una llave al aprendizaje. Ese que siempre está de la mano del dolor.

Gracias. Y gracias por no entender un pito lo que escribí.

31 de diciembre de 2010

2010: Balance general.

Como no quiero contar una historia, a modo de resumen, como venía haciendo últimamente, voy a hacer un punteo muy desordenado de lo que fue mi año. Estuve desde hace varias horas escribiendo y rememorando cada hecho significativo del año. Bueno o malo, la verdad que no interesa. Estoy en una etapa donde no puedo discernir eso.
Pero para no aburrirlos más, aquí va:
  • Destrozos y separaciones definitivas en mi entorno hogareño
  • Curso de verano, hecho por amor a la carrera (?)
  • Fail en el final de Matemática
  • Dream Theater
  • Gente con que inexplicablemente logré una afinidad maravillosa
  • Gente que inexplicablemente desapareció de mi entorno
  • Mejor amigo se raja a Chubut; reconciliación y separación con la que considerabas mejor amiga..
  • Verano en la pileta de la facultad
  • Negocios frustrados
  • Laburo. Primer trabajo y sus respectivas emociones
  • Dvd de Watchmen. Ultimate edition. Yay!
  • Bicentenario de la Argentina. Extraño sentimiento de pertenencia.
  • Censo. Mentiritas piadosas.
  • Muerte de Nestor Kirchner. Pegó feo. Despedida en Plaza de Mayo.
  • Iguazú. Tres días para el análisis.
  • Mc Cartney en Argentina. Se olvidó de los pobres. Se olvidó de mí (?)
  • El Satanismo puede ser interesante en varios sentidos.
  • Final más croto de 24. Siete años y tremenda frustración.
  • Teatro: La Bella y la Bestia y Más respeto que soy tu madre.
  • The Walking Dead.
  • Tron. Con soundtrack incluído.
  • Mundial Sudáfrica: Sorpresas, apuestas y vuvuzelas.
  • Rayes ciclotímicos constantes
  • Caminé a consciencia descalza por Puerto Madero.
  • Ignorar a familiares, y que algunos de ellos se acuerden de tu existencia.
  • Fulminar tu misma existencia.
  • Volver al dibujo y al mismo tiempo, que aprecien tus pinturas en la facultad.
  • Alhzeimer. Lol factor preocupante.
  • No fabricar más regalos.
  • Harry Potter 7, primera parte. Verla 3 veces seguidas, me hizo ver que está mejorcito que el libro.
  • Bailar 7 horas sin descanso. Lo apunto porque es un record personal.
  • Nuevo documento. Si, es una larga historia.
  • Hablar de Perón con tu vecino.
  • Decorar tu cuarto con dibujos de Milo Lockett.
  • Usar orgullosa en tu laburo un reloj de Bob Esponja.
  • La política aparece como tema de debate en el laburo, al igual que la xenofobia, cuyas discusiones se tornaron peleas. Con estilo.
  • Pelea callejera. Cambio de lentes a consecuencia.
  • Hablar de sexo abiertamente con tu jefa, mientras toman helado de Fanta naranja.
  • Encariñarte con la hija de tu jefa. De verdad. Y jugar con ella como si tuvieras 7 años.
  • Enamorarte de las culturas precolombinas y alucinar con ellas.
  • Fabricar tus propios muebles.
  • Aprender un solo acorde con la guitarra.
  • Descubrir que Buenos Aires no apesta después de todo.. En parte.
  • Extrañar al Abasto sin poder explicar el porque. A nadie.
  • Discutir con el hijo de tu jefa sobre Inception.
  • Proyectos de concientización ambiental favorables.
  • Activismo y voluntariado.
  • Museo de Xul Solar. Me emociono al recordarlo.
  • Orsai y Hernán Casciari en persona. Lástima que la foto que nos sacamos con el tipo, haya salido tan mal. Lástima.
  • Mercedes. La odisea más bizarra (suena a título de películaclase B)
  • Pagar por ver Eclipse en el cumpleaños de tu novio y tanto él como otro amigo, reconozcan que les haya gustado. Hay mucho por explicar allí. Creanme.
  • Thor. Con sólo acordarme, lloro.
  • Iron Man II
  • Toy Story 3. No entienden nada, gente.
  • Tener a la directora de nosequecosa de Pixar a escasos metros.
  • Volver al futuro. Y.. y.. Me emocioné. Lo siento.
  • Lost. Debo reconocer abiertamente que valió la pena hasta donde llegué a ver.
  • Stephen King. Y que tu vieja te prohiba seguir comprando sus libros.
  • El crecimiento de tu biblioteca personal.
  • Pasar el día del amigo en un hospital
  • Usar cartera y vestido. La femineidad cuesta mantenerla
  • Mutilar tu pelo por un personaje de animé.
  • No tener el poder de ordenar tu cabeza.
  • Bochazo estúpido en una materia.
  • Ser espantosamente sociable con gente random
  • 57 hrs fuera de tu casa, sin importarte nada de nada. Error.
  • Morirte de frío en el Congreso, para que aprobaran la ley de matrimonio gay.
  • Endulzarte con alguien que al final termina decepcionandote el triple de lo que creías.
  • Terminar una relación hermosa por el motivo anterior.. Darte cuenta al poco tiempo que te equivocaste, que no podés remediarlo o no sabés como y que es el hombre de tu vida a quien dejaste ir..
Anticipé que iba a ser desordenado. Pero pucha que se extendió. Y conste que me estoy olvidando de miles de cosas... Ya las recordaré y las escribiré.

El equilibrio del mundo


Nada mejor que este tema, para levantar tu emoness, recordar el mejor viaje ever del año y saber que el tipo estuvo tan cerca  y no le pediste autografo ni nada, porque se esfumó.
Porque dentro de todo importaba más la presentación de la revista Orsai (Ya contaré sobre eso. Más adelante, con mejor humor)

22 de diciembre de 2010

Back to the future

En el mismo Universo es donde chocamos todos.
Los recuerdos. Ellos son, los que alimentan las cadenas del tiempo.
Implacables algunos, sucios y oscuros. Hermosos e inolvidables.
Así son...
Por qué volver al futuro? Porque últimamente ando realizando un continuo viaje al pasado,
a buscar ese algo que el presente anda reclamando.
Esperen. Eso lo hice hace una estación...
Pero hace una estación que revivo ese pasado..
Como una especie de añoranza . ¿Añoranza a qué?
Cosas que tienen nombre y apellido, olores, nombre de países...
Cosas que se mezclan entre sí y se funden en el espacio..
Cosas intangibles, perdidas en la memoria vaga.


Que aburrido hablar siempre del mismo tema.
Que aburrido es.. andar buscando las llaves a sitios sacados del mapa.


Pasado - Presente - Futuro.. fusionadas en una misma realidad.
¿Qué más pedir? Nada más. Conformarme con ello..
Construir algo mejor, disfrutar de lo que está enfrente.


En el mismo Universo es donde chocamos todos.
Y desaparecemos. Con recuerdos incluidos.


Y volvemos a "resetear" el contador..


 Feliz 2011!