30 de enero de 2012

Carta abierta

Querido,

              Si pudiera decirte alguna vez que todo lo que hice fue por amor... Por amor del más sincero que te tuve y te tengo.
Si pudiera decirte que te hice mal sin haberte confesado mis fallas o peor, el haber intentado enmendarlo a tu lado. Corrijo: Era algo que no tenía solución, por más que lo hubiéramos intentado. ¿Cómo lo ibamos a lograr? ¿Qué pensabas hacer? A mi no se me ocurrió nada, más que sacrificar todo lo que habíamos construido para que no sufras por alguien que no valía la pena.
Y ahí me tuviste.. Llorándote y balbuceando cosas que no tenían sentido alguno en las palabras que escogí en ese momento para decirte Adiós, pero en mi cabeza había un discurso preparado para evitarte todo ese dolor que vi en tus ojos y que jamás me podré perdonar. Eso es algo que no podré hacer.
Si he podido perdonar tu accionar y el de otros que eligieron defenderte... Hicieron bien.
De verdad admiro a tus amigos, porque tienen palabra, te valoran por lo que sos y no se dan vuelta a la primera ni te dejaron solo. Nunca. A esos, cuidalos, porque sé que los necesitás.
¿Qué más agregar? Gritar perdón a los cuatro vientos; gritar que te amaré por siempre, más allá que cada uno intente rehacer sus respectivas vidas del mejor modo posible.
Gritarte que todo lo que he hecho, se simplifica en una estúpida e innecesaria palabra llamada sacrificio.
Pero no sé si servirá decirte todo esto ahora. Ojalá en un futuro lo puedas leer y quizás comprender todo lo que hice.

Lamento la cursilería y la falta de sentido. Pero es imposible editar los sentimientos.

¡Buena vida!

25 de enero de 2012

Diario de viaje: Pinamar

What shall we use to fill the empty spaces
Where waves of hunger roar?
Shall we set out across this sea of faces
in search of more and on applause?
What shall we do now?


Diario de viaje: San José, Entre Ríos

Sentar cabeza. La verdad que no entiendo aún ese concepto, pero como casi la mayoría de mis conocidos no dejaron de ataladrarme la cabeza con dicha frase, decidí irme... Irme por un rato de las preocupaciones, de los mambos que cada día se tornaban más complicados de resolver, de los pesares e incluso de los aciertos y de las alegrías. 

Pocos lugares me cambiaron de parecer; pocos lugares acomodaron mi cabeza a pesar de las consecuencias que les trajo a los demás.



All alone, or in two's,
The ones who really love you
Walk up and down outside the wall.

23 de enero de 2012

El sentimiento del día

Carajo.

Charla con mi conciencia

- ¿Pero qué te pasó? ¿Por donde anduviste?

- Nada. Recién vuelvo.. ¿De qué me perdí?

- Y.. Pasó de todo. Elecciones, caídas de aquellos países que parecían inmutables, revoluciones y la misma mierda de siempre a nivel nacional. Pero en serio, qué te pasó? Contá.

- Puf, es que viví algo maravilloso y espantoso al mismo tiempo. No sé como describirlo. Viajé, me fui a vivir sola, me re contra saturé en la facultad, me endeudé hasta las manos, fui a muchísimos recitales, conocí mundos nuevos. ¡Tantas cosas! Y acá me tenés, con un nuevo adiós en mi boca y casi lista para continuar.

- Pará, pará. Esto ya lo vivimos: "Lo del adiós, lo de seguir adelante". No me digas que...

-.. Si. Por algo estoy acá. Desperté de esa ensoñación perfecta, que sé yo.. No pude seguir allí, me engañé en estos últimos tiempos, y engañé a todos.

- Pero flaca, me estás cargando? ¿A quién engañaste? ¿Qué hiciste?

- ¡No hice nada! Lo que hice fue dejar de estar enamorada, perder esa magia que tiene el amor, lidiar con ello y ...

-.. dar un paso al costado.


Despertar de aquél sueño hermoso al cual me sumergí hace 10 meses fue volver a experimentar el dolor que es perder a una persona a quien considerás el hombre de tu vida, pero esta vez con un matiz distinto que resuena en tu cabeza sin cesar: "Si lo amas, dejalo ir".
Pero pará, esto con un agregado especial: "  Si lo amas, dejalo ir para siempre".