26 de abril de 2012

La formula del complesso

Gente corriendo. 
Gente caminando.
Gente gritando.
Gente riendo.
Gente haciendo muecas.

Y yo sentada sin poder reaccionar. Me lleva el frío por delante y yo sigo aquí, sentada. 
Esperando algo, quizás. Pero no. No espero nada. 
Sólo observo a la gente haciéndole frente a la vida de distintas formas y yo aquí, sin poder encontrar el rumbo. 
Buscándole los pormenores a todo, molestándome por nimiedades sin detenerme a pensar en lo sencillo que puede ser enfrentar los obstáculos que yo misma me los impongo de una manera tan... Tan ridícula. 
Y me siento molesta, porque sigo sin poder reaccionar, sin poder imitarlos, sin siquiera llorar ante semejante redescubrimiento. 

Gente que sigue los últimos gritos de la moda.
Gente con la última tecnología en la mano.
Gente comentando sus logros más recientes.

Y ahí reacciono por primera vez. Me frustro; siento el frío que me atraviesa por todo el cuerpo de una manera tan despiadada que me pongo a llorar.
Lloro de la frustración, de sentir que no puedo alcanzar ninguno de mis objetivos, que estoy estancada en esa plaza, perdida en el mundo y que así seguiré hasta el final de mis días. 
Pero sigo sentada, invisible al resto, observando el trajinar de las personas como si fuera un consuelo al desconcierto y a la confusión de todo lo que me pasaba en ese instante.

Gente mendigando.
Gente llorando.
Gente enferma.
Gente angustiada.

Volví a reaccionar, pero esta vez me sentí realmente molesta por esa envidia que sentía por todos aquellos que gozaban de sus logros materiales, mientras otros sólo ansiaban cosas más simples, e incluso inalcanzables. 
Lloré, pero de felicidad por saber que aún había esperanza de conseguir aquello que más deseaba. 

El secreto estaba en hacer cosas simples, y así comencé a sentir, pero de verdad.
Incluso el frío, pero de un modo agradable.


13 de abril de 2012

Ella II

Entre la locura y su belleza indomable, ella se para en medio de la avenida esperando que algo o alguien se la lleve. ¿Por qué? Está desesperada, cansada, deprimida. 
Jamás, en estos años que llevamos siendo amigos la había visto así: derrotada
Perdida entre la muchedumbre, ella va caminando despacio, con la cabeza baja, vestida con colores tan básicos como aburridos. Incluso ha dejado de sonreír, pero de verdad.
He intentado sumergirme en su mundo, pero tiene un poder envidiable para esconder sus verdaderos problemas. Puede contarnos miles de cosas, pero jamás va al punto central de su dolor. Es como si le encantara sufrir acompañada por su soledad.

Pero esta vez no sufre por ese alguien, sino porque siente que su Universo se va desmoronando. Yo lo sé, lo siento. Siento su energía, sus vibras perdidas con el viento. Vulnerable, se desiste a escuchar cualquier consejo, perdiéndose en sus pensamientos que rayan del pesimismo. 

No sé a que extremo jugará esta vez, pero tendré que hallar alguna solución para devolverle su vitalidad, su color, su alegría. 
Incluso me pasaría toda la vida buscando ese elemento perdido, pero no me detendré hasta lograrlo...



Voy a curarte el alma en duelo,
voy a dejarte como nuevo
Y todo va a pasar,
pronto verás el sol brillar

Tú más que nadie merecer ser feliz

Ya vas a ver como van sanando
poco a poco tus heridas
Ya vas a ver como va
la misma vida a decantar, la sal que sobra del mar

10 de abril de 2012

Music sounds better with you

A beautiful disaster
Si bien el título de la canción no te pertenece, Dave, sólo dejame decirte una cosa: Gracias.
Gracias por haberme transmitido con una pasión irrefrenable tu amor por la música, tu pasión, tu energía y por sobre todas las cosas, tu buen humor. Porque te chupa un huevo si te quedás sin voz en la mitad del recital, te parás como 10 minutos a monologar sobre tu vida y si bien, pueden pensar que está todo premeditado, vos le ponés una chispa de espontaneidad que ningún otro cantante/rockero/whatever haya tenido jamás.
¿Qué más decirte? ¿Admirarte por el resto de mi vida? No sé si eso esperás. Esperás que sigamos escuchando tu música, y eso seguiré haciendo.. Seguiré mis sueños como vos hiciste, perseverando y tratando de autosuperarme día a día.
Podrá sonar estúpido, pero carajo que me demostraste eso y mucho más. Y te agradezco, te agradezco con el alma por haberme hecho pasar la mejor noche de mi vida, escuchando lo mejor que me pudiste brindar: Rock.

Del más puro, del más bueno.